Una de payasos


Acabó la 16ª Mostra Internacional de Pallassos de Xirivella. Me acuerdo cuando siendo un cachorro mama perra me llevaba año tras año a esta localidad de l’Horta para reir pulgosamente con los clows.

Este año una decena de compañías han dejado el rastro de sus narices rojas. Todo comienza con a Mostreta: la semana previa a la inauguración oficial de la MIPX, los más peques del municipio pueden disfrutar con sus compis de cole de pases hechos a medida para ellos. Y calentados los motores, una vez llegado el finde comienza de nuevo el espectáculo del 12 al 22 de noviembre.

Payasos de Bélgica, de Argentina, de Chile, de Francia, de Catalunya, de Madrid y como no, de Valencia. Yo me quedo con “Los Chatos” de Chile, por su espectáculo arriesgado, con humor hecho con niños pero para mayores, y porque al ser al aire libre dejaban estar a los perros. Pues no canté ni nada con los sus números musicales... (esto va en serio, el perro entonó los ladridos).

Este año, además, la asociación PallaS.O.Spital organizó una gala para celebrar sus diez años y continuar alegrando a todos esos niños y perritos enfermos en hospitales y veterinarios.



Y acompañando a la Mostra también se organizaron una exposición de fotografías “De narices en el hospital”, una escuela de payasos con dos cursillos intensivos, el cuarto concurso de números de clown, o incluso un partido de futclown por la paz y la no violencia.

Según tengo entendido, en alguna edición de la Mostra han participado algunos de los alumnos de la ESAD del taller de clown. Y por si fuera poco, este festival colabora mediante convenios y ayudas con tres ONGs, para hacer el mundo un poco más sonriente.

Muchas guaucias payasos.